Tratamiento
de venas varicosas y úlcera s por estasis venosa
Las venas varicosas afectan hasta al 20% de los hombres
y el 30% de las mujeres en determinado momento de sus
vidas. Tienen un aspecto como de venas hinchadas o
retorcidas, y en la mayoría de los casos se observan
debajo de la piel de las piernas.
Para la mayoría de las personas, éstas constituyen
principalmente un problema de estética. Para otras,
pueden ocasionar diversos síntomas y complicaciones
médicas.
Riego
sanguíneo de las piernas
La sangre es bombeada desde el corazón hasta
las piernas a través de las arterias. Cuando se
acaba el oxígeno y los nutrientes transportados
en la sangre, ésta regresa al corazón a través
de las venas. Para que este ciclo se complete desde
las piernas, la sangre en las venas debe correr en
dirección ascendente, en contra de la fuerza de
gravedad. Las válvulas de una vía que están
dentro de las venas evitan que la sangre fluya en dirección
descendente.
Los músculos de las piernas contribuyen a este
proceso. Cada vez que los músculos de la pantorrilla
o el muslo se contraen al caminar, se oprimen las venas
más profundas de las piernas. Las válvulas
aseguran que la sangre corra en dirección ascendente.
Venas superficiales y profundas
La sangre de las capas externas de las piernas se
junta en las venas próximas a la superficie. Éstas
venas de la superficie, o superficiales, están
conectadas con las venas más profundas de las
piernas a través de las venas perforantes. Cuando
la sangre no fluye adecuadamente desde las venas superficiales
hasta las venas más profundas, puede acumularse
presión en las venas superficiales. Esto hace
que la sangre se junte y que se formen los signos visibles
de las venas varicosas.
Causas
de las venas varicosas
Aún
no se conoce claramente por qué se desarrollan
las venas varicosas. Este trastorno parece afectar
a humanos únicamente, hecho que sugiere una
relación con la posición vertical.
Uno de los problemas básicos es el daño
a las válvulas. Esto significa que la sangre no
puede subir por las venas fácilmente y las posibilidades
de que se acumule son mayores. Las personas pueden
heredar una tendencia a válvulas débiles.
O bien, las paredes de las venas pueden debilitarse,
lo que ocasiona el agrandamiento de las venas y, como
resultado de ello, daño a las válvulas.
El
riesgo de venas varicosas aumenta durante el embarazo
y en las personas con sobrepeso. Las venas varicosas
se atribuyen también a muchos otros factores,
como permanecer de pie durante períodos prolongados,
sentarse con las piernas cruzadas, fumar y tener una
mala alimentación. No obstante, no se cuenta con
evidencia científica contundente que avale estas
teorías.
Síntomas
Los síntomas de las venas varicosas no necesariamente
coindicen con su tamaño, y muchas personas no
tienen ningún síntoma al margen del desagradable
aspecto estético.
Entre los síntomas leves podemos mencionar:
- Dolores o malestar en las piernas
- Picazón de la piel de las piernas
- Tobillos hinchados
Los síntomas más graves generalmente están
asociados con las complicaciones de las venas varicosas.
A saber:
Tromboflebitis: Una
o más venas próximas a la superficie de la
piel puede tornarse dolorosa o enrojecer debido a la
inflamación o la obstrucción de la vena.
Esto no es lo mismo que la trombosis de vena profunda
(DVT), una obstrucción más peligrosa, que
podría requerir tratamiento hospitalario.
Hemorragia: Las
venas hinchadas próximas a la superficie pueden
sangrar profusamente ante un golpe o un corte en la
pierna. Si no se detiene, esta hemorragia puede convertirse
en una emergencia médica. La persona afectada
deber recostarse, debe levantar la pierna (el pie debe
quedar más arriba que la cadera) y debe aplicarse
presión sobre el punto de la hemorragia. El próximo
paso es buscar atención médica.
NOTA: Los productos/las
indicaciones para el control de heridas no están
aprobados por la FDA (Administración de Alimentos
y Medicamentos) de los EE.UU. |